domingo, 4 de noviembre de 2012

De regreso


Good morning my friends!

Os vuelvo a escribir desde UK, pero a partir de ahora siempre con mi propio ordenador, lo cual es una gran mejora. De hecho este viaje a España ha sido una bendición, no sólo porque me he traído un cachito de España conmigo para hacerme la vida más confortable, sino porque me he reseteado por completo y vengo con el chip cambiado. Se que esto no quiere decir que los días malos hayan terminado, pero vengo mentalizada de que habrá días buenos, días malos, días horribles, días en los que me quiera comer crudas a las niñas… Uno de los trucos para no agobiarme más de la cuenta es no pensar a largo plazo. Nada de “que me tengo que quedar aquí hasta junio, que vértigo”. A partir de ahora, pasitos cortos. El próximo evento destacable es que dentro de 25 días viene J. a verme, así que en eso focalizaré toda mi atención. 25 días… ¡eso está chupado! Así que lo dicho, pasitos pequeños.

La despedida fue dura, pero no tanto como la última vez. Ya sabía adonde venía, y eso es mucho. Así que no hubo apenas lágrimas, aunque yo tenía un cosquilleo de nervios desde dos días antes de marchar. El vuelo fue horrible por las turbulencias, pero por lo demás todo fue sobre ruedas, el padre me vino a buscar, las niñas me recibieron bien, e hice babysitting esa noche sin más problemas que los típicos con las niñas (que se levantan, que se va la una al cuarto de la otra…).

Pero como os dije hace poco en una entrada, siendo au pair nunca te aburres, siempre hay alguna preocupación, algo en lo que pensar o de lo que ocuparse. Y es que resulta que mi familia se muda. ¿Cuándo? ¿A dónde? ¿Por qué? No tengo ni idea. El lunes pasado, antes de irse, la madre me dijo que dejara mi habitación bien recogida que iba a venir alguien a ver la casa. Me quedé un poco extrañada, pero como son un poco raritos a veces pues no le di más importancia. Pero resulta que a la vuelta la madre había entrado a mi habitación y me había guardado las cosas que yo tenia encima de la mesita, calzado que estaba en el suelo… porque es que había venido alguien, o iba a venir, yo que se, a ver la casa. No pregunté nada porque entre el cabreo de que hubiese entrado en mi habitación y tocado mis cosas, y el lío del vuelo y demás no enfocaba bien mi mente. Pero cuando hace un rato me ha dicho que mañana vienen a la una a ver la casa, y que me asegure de que todo está recogido y que deje algunas luces encendidas, ya me he mosqueado y le he dicho “Why?”. Y la respuesta ha sido una cara rara y que están pensando en vender la casa. La cara rara no se si ha sido porque ha pensado que a mi que me importa, o porque no quería hablarlo delante de las niñas (efectivamente, E. se ha puesto a lloriquear diciendo que no se quiere mudar). Pero el caso es que ya no me he atrevido a preguntar más.

Pero tengo muchas preguntas. ¿Cómo va a afectar esto a mi vida, a mi trabajo? ¿A dónde se mudan? ¿Cuándo? ¿Voy a seguir teniendo una habitación con baño para mí? ¿Se van a vivir a un sitio más céntrico y me he comprado una bici para nada? ¿Va a implicar más trabajo o menos? En realidad, sospecho que si se mudan, lo van a hacer a otra casa en este mismo pueblo, porque no creo que vayan a sacar a las niñas del colegio a mitad de curso. Obviamente, lo mejor para mí es que se muden a un pueblo más grande (sería taaaan feliz si se mudaran a Bishop’s…) pero no creo que vaya a pasar. Muy lejos no se pueden ir, porque creo que la empresa del padre está aquí cerca, lo que creo es que se han dado cuenta de que no necesitan una casa tan grande (¿o a lo mejor se han dado cuenta de que necesitan una casa MÁS grande?) y se mudan por eso. Pero creo que no les costaría nada comentarlo conmigo, que tampoco me parece que sea un secreto de estado y, hasta cierto punto, influye en mi vida aquí y en mi trabajo. ¿Y si se van aun más a tomar por culo? ¿Y si mis condiciones de vida, que algunas ya de por si son una putada, empeoran aun más? O mejoran, y eso es bueno. Igual en la nueva casa por fin ponen wifi. Igual lo quieren hacer con muuucho tiempo y no se mudan hasta después de que yo me marche. O lo que sea. La cuestión es, ¿tanto les cuesta hablarlo conmigo? Porque se tienen que imaginar que tengo algunas preguntas… Tampoco les voy a preguntar que en cuanto venden la casa, que no es asunto mío, pero las cosas que me influyen directamente no estaría de más comentarlas.

Y ahora mismo me acaba de llegar mi tarjeta de débito inglesa, ¡hurra! Tampoco es que tenga dinero en la cuenta jeje, así que de momento es inservible, pero ya la iré utilizando. Y sin más que contar por ahora, os dejo, me voy a preparar que esta tarde me voy a ver al cine la nueva de James Bond. Sospecho que me voy a enterar de poco, pero todo sea por no quedarme en casa vegetando, que es domingo y hay que disfrutar. Así que lo dicho ¡a salir y a disfrutar!

4 comentarios:

  1. La verdad que me parece un tanto fuerte que una decisión de esas dimensiones no te la comenten, que ya tampoco es que te tengan que consultar pero al menos si ponerte al día con lo que tengan pensado hacer pero bueno, a ver si se van dando cuenta y nunca mejor dicho cuentan más contigo! Espero que te vaya todo bien besos!! =)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues si, eso digo yo. No pido que me "pidan permiso", vaya, ni mucho menos, pero en vez de tenerme todo el día para atrás y para adelante con que si viene gente a ver la casa y no se que...¿no hubiese sido más fácil decirme "oye, que estamos pensando en vender la casa y va a haber una temporada que va a venir gente a ver la casa", y así me darían ya el píe a preguntarles que a dónde quieren mudarse y cosas así? Son estas cosas que a ellos no les cuesta nada y que, sin embargo, a mi me dice mucho de ellos... Pero bueno voy a dejar de cotorrear ya, gracias por el apoyo moral!

      Eliminar
  2. Fijo que es cerca mujer, no te preocupes.

    Tara-tará tara-tará tan tan tan...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me llamo Bond, James Bond...

      No, mira, aun no sabes nada de mi...pareces nueva. Con la suerte que, como has ido viendo, tengo, estos se mudan a una casa en la cumbre del pico más alto de la Escocia más profunda. Na, ya te digo, probablemente a otra casa en el mismo pueblo. Sólo espero que sea más fácil de limpiar...

      Eliminar