La dieta definitiva

¿Quieres perder peso rápido? ¿Quedarte más flaca que Mario Vaquerizo en la Isla de los Famosos? ¡Olvídate de la dieta Dukan, la del pepino, incluso la del cucurucho (pero sólo de la parte de comer poco)! Yo tengo la dieta definitiva: ¡HAZTE AU PAIR!

No me he vuelto loca, no. Es que una de las cosas de las que tenía ganas al llegar aquí era de pesarme, porque en la casa hay un peso pero que, como todos en esa casa, no habla mi idioma (¿alguien me dice en cristiano cuantos quilos son 8:8 y medio?). Ayer me pesé y me he quedado asombrada al ver que he perdido unos 4 quilos. Fíjate, yo venga a ir al gimnasio y a comer ensaladas este verano para estar guapa en bikini y lo único que necesitaba era irme a otro país. Pero no os preocupéis por mi, porque en cuanto pisé suelo español me puse a comer como si llegara de una guerra y en dos días ya he debido de recuperar casi todo. Curioso que aquí tenga hambre y allí no. Será algo en el aire...

No hay nada como estar en casa. El lunes por la tarde llegué y J. me estaba esperando. Deberíais haber visto que besos y abrazos. Parecía que en vez de dos semanas habíamos estado sin vernos 2 años. Y para que contaros en mi casa. El lunes 22 había sido el cumpleaños de mi madre, así que quería que esta visita fuese mi regalo de cumpleaños. Había avisado a todos de que venía menos a ella. A mi madre sólo la había dicho que la había enviado algo y que estuviese pendiente porque le llegaría el 29 por la tarde. Así que me hice pasar por un repartidor en el telefonillo y me planté delante de ella con una sonrisa enorme en mi cara. Yo creí  que se llevaría una sorpresa, pero que nos echaríamos unas risas y ya está. Pero me encontré con que me recibía como si fuese su hija perdida. Besos, abrazos, lloros, más besos, más abrazos, más lloros, preguntas del tipo "¿vienes para quedarte?"... Esto me hace pensar que si las cosas están así y llevo fuera un par de semanas, ¿qué ocurrirá cuando venga por Navidad y haya estado fuera casi dos meses? ¿Tirarán cohetes en mi honor? 

Ya os imaginareis que estoy como en el cielo. Se me han olvidado todas las cosas que me agobiaban y molestaban cuando estaba aquí, y no hay como no tenerlos para apreciar esos pequeños detalles que te hacen feliz: una sopita casera de pollo, una sonrisa de tu madre, los ojillos traviesos de tus sobrinos, refugiarte en los brazos de tu novio, la familiaridad y calidez de las calles y tiendas que tanto te aburrían antes porque las tenías muy vistas. Creeréis que le estoy dando munición a mi angustia y mi miseria para que me ataque con más intensidad a la vuelta, pero esta visita me está dando fuerzas. Sé por qué me fui y estoy preparada para volver, y para hacerlo con energía. No me pienso rendir.

Y hablando de volverse a Inglaterra, mi relación con la agencia se ha terminado. Hace unos días me enviaron un correo, que sentían no haberme encontrado aun familia, que eran unas fechas complicadas, pero que seguían intentándolo. Esto me recordó que, si no había echado mal las cuentas, ya habían pasado las 10 semanas que tenían de plazo para encontrarme familia, así que les respondí diciéndoles que no quería seguir con el proceso y que, por favor, me devolvieran el dinero de la inscripción. En su momento alabé las virtudes de las agencias para las personas miedosas como yo, pero ahora que ya se terminó el proceso de búsqueda, yo le recomendaría a la gente que se ahorrase el dinero y se lo buscase por su cuenta. No sólo porque mi agencia no me haya encontrado nada, porque estoy segura de que a muchas otras personas les han encontrado familia, sino porque si te paras a pensarlo tampoco hacen nada que no puedas hacer tu mism@. Tu te tienes que buscar y rellenar todo el papeleo, tu tienes que hacer las entrevistas con las familias, tu tienes que buscarte los vuelos y, una vez allí, si estás mal con la familia... Mis dudas tengo de que puedan recolocarte tan fácilmente, si tienen tantos problemas para encontrarte familia la primera vez. Así que si, ahora con todo en perspectiva si que le recomiendo a las futuras y futuros au pairs que primero lo intenten unas semanas por su cuenta.

Y por lo demás, aquí estoy, gastándome 300 euros en los vuelos para Navidad (tengo ganas de llorar, si). Pero nada paga pasar la Navidad con tu familia (bueno, si, 300 euros lo pagan). De momento sólo me queda seguir disfrutando, haciendo recados para hacerme la vida más cómoda en Inglaterra. Así que con esta alegría y este salero me despido hasta mi vuelta a tierras inglesas. ¡Adiós!

Popurrí

Hey guys!

Agárrense los machos porque viene una entrada contundente ¡Por fin puedo actualizar desde mi propio ordenador, sin faltas de ortografía y con la ñ! ¡Bien! Seguro (o no) que os estáis preguntando el por qué de mi título ¿Popurrí? Pues he decidido poner hoy este título porque tenía tantos títulos posibles en la cabeza que no podía decidirme por ninguno: “fin de semana”, “primera vez en Cambridge”, “solucionando problemas”, “efectivamente: el ojo del huracán”… Y es que, siendo au pair, un par de días pueden dar para mucho. Pero como diría nuestro amigo Jack, vayamos por partes:

Solucionando problemas: Esto hace referencia a dos cosas, a que he encontrado una manera de poner Internet en mi habitación, y a que por fin tengo bici. Con respecto al Internet, lo que he hecho ha sido comprar una tarjeta prepago en una compañía inglesa llamada three con la que recargando 15 pounds al mes tienes 300 minutos en llamadas a móviles ingleses, 300 mensajes y, esto es lo más importante, Internet ilimitado. Mi móvil, como casi todos los móviles relativamente modernos, se convierte en módem, así que puedo conectarme con el ordenador. Qué maravillosa puede ser a veces la tecnología. Pero como parece que cada solución me conlleva dos nuevos problemas (aburrirme no me aburro…), me ocurren dos cosas. Una es que el cargador de mi móvil hace tiempo que va mal, así que consigo cargar dos rallitas de la batería cada vez y con mucha suerte. La otra es que utilizar el móvil como módem consume mucha batería, así que tengo que tener móvil y ordenador conectados al mismo tiempo a la corriente para poder utilizar el Internet sin interrupciones. Y a parte de que como os digo, el cargador va fatal, sólo tengo un adaptador de corriente, así que o conecto uno, o conecto el otro, hasta que a alguno de los dos se le muere la batería. Menos mal que voy para España el lunes y puedo comprar una regleta, un adaptador, y que me está esperando un móvil nuevo cortesía de Movistar y de los 64 leuros que van a salir de mi bolsillo. Realmente me hubiese salido más barato comprar el mismo móvil aquí y sin las chorradas de los programas de puntos, pero bueno, lo hecho, hecho está. Y con respecto a la bici, pues si, después de un par de semanas de búsqueda, hoy, así de repente, contacté con una chica y quedamos en Cambridge para comprar la bici. Esto lo contaré después, porque ha sido toda una aventura. En fin, yo creía que esto de la bici iba a ser la panacea, pero vamos, nada más lejos de la verdad. Se montar en bici, porque aprendí de pequeña y, como se suele decir, eso nunca se olvida, pero lo hago de pascuas en ramos y no estoy acostumbrada en absoluto, así que la vuelta de la estación de Elsenham a “mi” casa ha sido una paliza buena, y unos 25 o 30 minutos y a ratos bajándome de la bici porque ya no podía más… La suerte me ha sonreído un poquito y, después de haber estado lloviendo todo el día, el rato de la bici ha estado completamente despejado y con luna, por lo que he podido ver bien. Pero habrá otros días en los que lloverá y como aquí no hay ni una tristísima luz en las carreteras, pues tendré que volver de aquella manera y me atropellará un coche o de alguna forma moriré. Pero bueno, supongo que también me tendré que acostumbrar a esto, hacer pierna y echarle valor.

Fin de semana: Este es el segundo fin de semana que paso aquí, y si, me he animado a salir un rato. Pensareis que esto es bueno, y si, lo es, aunque no todo ha sido como yo me esperaba. El viernes no tuve un buen día, estaba exhausta de la semana y me tocaba el cleaning, así que para cuando llegó la tarde estaba más que muerta. Pero había quedado para ir a jugar a los bolos a Bishop’s y, dado que era la primera vez que salía por aquí de noche, pues me apetecía probar. Aun no tenía la bici así que un amigo de M., la otra au pair del pueblo, nos vino a buscar. A mi no me suele gustar montarme en los coches con gente que no conozco, pero si encima conducen como Dani Sordo metido de tripis pues ya para que quiero más. Iba más tensa que la cuerda de una guitarra. Pero si vives en el culo del mundo como yo, a veces tienes que hacer de tripas corazón si quieres salir un rato. En Bishop’s nos reunimos con más gente para jugar unos bolos. Se hicieron rápidamente dos grupos de españoles y no españoles y, aunque se que esto está mal y es lo menos recomendable, para la socialización y para el inglés, estar un rato con españoles y hablar con ellos me “prestó” (va por vosotros, Lucía y Jairo). También escuchar que, quien más y quien menos, tiene sus cosas con sus host families me dio cierta tranquilidad. Los bolos se acabaron, y M., el chico que nos llevaba a casa y otra chica querían irse de fiesta, y los españoles irse a dormir. Así que ahí estaba yo, queriendo ir a dormir también pero sin más remedio que aguantar hasta que el que me devolvía a casa, que ya llevaba dos pintas encima, decidiese irse. Y menos mal que aquí cierra todo a las 2 de la mañana, porque si llega a cerrar a las 4.30 como en España me muero allí mismo, no sólo de agotamiento, sino de lo fuera de lugar que me sentía. Ellos son más jóvenes que yo y están deseando desmadrarse, emborracharse y enrollarse con lo primero que pillan. Yo, irme a la camita. Claro que hay días que me apetece salir como Dios manda, pero cada vez son los menos. Así que allí estaba yo, sintiéndome realmente incómoda, y viendo como el que me tenía que llevar a casa sana y salva, y que ya de sereno conducía como un loco, se metía otras dos pintas entre pecho y espalda. Pero finalmente los bares cerraron, nos fuimos a casa y llegar, llegué. Pero de alguna manera esta salido no me reconfortó, sino que me dejó aun más agotada e inquieta y tuve pesadillas la breve noche que dormí, porque a las 8.30 ya estaba despierta. Nota aparte, aunque me desperté a esa hora, estuve en la cama y leyendo bastante rato, así que salí de la habitación tarde. S, la madre, me dijo que anoche había llegado muy tarde. ¿Muy tarde? ¿Un viernes a las 2.30? Y que a las dos estaban despiertos aun esperándome… Y yo que pensaba que había dejado a mi madre en España, y que los días de “menudas horas de llegar anoche eh” ya se habían pasado. Efectivamente, que los bares cierren a las 2 se me hace extremadamente raro e inquietante. Yo ya soy más tranquila a la hora de salir y no me voy muy tarde a casa, pero que cierren a las 2 provoca situaciones tan siniestras y bizarras como que un “hombre”, por llamarle algo, esté totalmente borracho tirado en el suelo a las 11 de la noche, o que entres en una discoteca a la 1 de la mañana y te encuentres lo que te encontrarías en España en un after a las 8. ¿Y por qué hay tantos tíos solos acechando como si en vez de de fiesta estuvieran de caza? Es siniestro. En conclusión, esto es otro mundo, y hay que adaptarse, con la mentalidad de que dentro de unos meses volveré a España y los bares y la fiesta a las horas “adecuadas” seguirán en su lugar. Lo ocurrido el sábado mejor os lo cuento en el siguiente punto, y el domingo es día de descansar, recuperar fuerzas y hacer babysitting e igual una peli con M.

Primera vez en Cambridge: Hoy, sin comerlo ni beberlo ni planearlo para nada me he plantado en Cambridge. Y ha sido toda una aventura. Todo empezó esta mañana, cuando vi una bici que me interesaba y escribí al vendedor. Un rato después vi que me había respondido, diciéndome que podíamos quedar en Cambridge a las 2. Ya me venía un poco tarde, y estaba por decirle que mejor mañana, pero como mañana no hay bus para ir a la estación, pensé “que narices, pues me voy a Cambridge”, y la dije que a las 16.30 estaría allí. Ya iba con el tiempo justo, porque tenía que coger el bus de las 15.05, para llegar al tren de las 15.22, así que me vestí a toda leche y salí pitando. Que casualidad que, habiendo estado todo el día despejado, justo cuando estaba esperando al autobús en medio de un prado, que es donde para, se pone a llover como si no hubiese mañana. Ahí estaba yo, debajo del chaparrón que parecía la huerfanita Annie. Lo que no fue casualidad fue que el autobús llegase tarde, ya que siempre lo hace. Yo estaba rezando a todos los dioses para que llegase puntual, pero no me hicieron caso. Así que si tenía que llegar a las 15.05 llegó a las 15.15. Yo estaba segura de que perdería el tren, porque encima aun no había ni comprado el billete. El autobús llegó a la estación de tren, crucé corriendo al otro andén, fui a sacar el billete en la máquina, y esta no funcionaba… ¿Por qué a mí, que soy una buena persona? Y vino el tren, y yo no sabía que hacer, si montar sin el billete, si me multarían, si le podría comprar el billete al  revisor. Vi que salía una señora y le pregunté a grito pelado: CAN I BUY THE TICKET IN THE TRAIN!? Yo estaba tan acelerada que sólo me faltó zarandearla de los hombros mientras le gritaba. No se que me dijo, pero me hizo señas para que entrara, así que no sabía, salir, entrar, salir… finalmente me quedé dentro. Todo sudorosa y con cara de trastornada le pregunté a una pareja dentro si había revisor y si podría comprar los billetes, preocupada de que me metieran una multa por no llevar billetes, pero me dijeron que no había revisor, y que creían que podría comprar el billete en la estación de Cambridge. ¿Os viene a la mente la típica gente medio loca que a veces está en los transportes públicos haciendo cosas raras? Pues ayer yo era esa persona. Ya por fin me calmé y me senté, y al llegar a Cambridge, efectivamente, unos hombres con unas maquinas situados en las barreras me dieron el billete de ida y de vuelta, sin multarme ni nada por el estilo. Así que allí estaba, plantada en Cambridge con una vaga idea de adonde iba. Pero no tuvo mucha pérdida, encontré a la chica donde habíamos quedado, me dio la bici, yo la di el dinero, y sin más cada una se fue por su camino. La bici es de montaña y, aunque yo no entiendo absolutamente nada de bicis, parece estar nueva y en buen estado. Y como os digo, con ella volví a casa, así que funcionar, funciona. Después me reuní con Lucía y Jairo y dimos una vuelta, conocí un poco la ciudad, tomamos algo, fuimos al Primark… Las cosas que más me han llamado la atención de Cambridge son la enorme cantidad de bicis que hay, amarradas a cada árbol, poste, farola, verja, cientos y cientos de bicis, y lo prontísimo que cierra todo. Pase que entre semana, que de todas formas yo a las 10 ya estoy soñando con los angelitos, todo cierre pronto, pero que una cafetería cierre un sábado a las 6 y media de la tarde… ¡venga hombre! Siempre me había gustado mucho Inglaterra en general y Londres en particular, pero me he dado cuenta de que no saben vivir la vida. ¡Con lo bien que estaba yo en España, tomándome mis cañas a las 10 de la noche!

Efectivamente: El ojo del huracán: En una entrada anterior comenté que ya podía decir que estaba bien, pero que no sabía si esto sería permanente o si volvería a caer en la tristeza y la angustia. Pues he vuelto a caer. El viernes me levanté fatal, creo que en parte por el cansancio acumulado de la semana y por la perspectiva de tener que hacer el cleaning, que es una paliza. Estaba reventada y sólo tenía ganas de llorar. Y aunque es verdad que a veces tengo momentos así aun, pero se me pasan, el viernes no se me pasó y este nudo en la garganta que se niega a deshacerse parece que se ha instalado y ya no se quiere ir. Debería estar contenta porque me voy mañana a casa y voy a poder traerme un montón de cosas que me harán la vida más agradable, a parte de estar con mi familia, amigos y J. Pero no se por qué, esto en vez de consolarme, me angustia más. La perspectiva de tener que volverme y esta vez ya si, hasta Navidades, me mata. Ya he escuchado todos los consejos habidos y por haber ( y los agradezco de todo corazón): céntrate en las cosas buenas, aprovecha y sal y diviértete, busca cosas para distraerte, no te presiones a ti misma y date tiempo, se fuerte, no pienses tanto en las cosas… Y yo lo intento hacer todo. Puedo intentar centrarme en las cosas buenas, en aprovechar que estoy aquí y disfrutarlo, en centrarme en que no es para siempre, que son unos meses y cuando vuelva todo estará allí, nadie se habrá ido a ninguna parte, puedo intentar no pensar. Pero el nudo que no me deja respirar, los nervios, los ratos de querer llorar, ahí están, y no puedo controlarlos como puedo intentar controlar a mis pensamientos. Igual dos semanas no son suficientes, igual necesito más, igual nunca me adapto y me tengo que volver, quien sabe. No quiero rendirme, pero tampoco pasarlo mal. Así que el plazo son las Navidades: si para Navidad no hay perspectivas de mejora, me vuelvo a casa. Pero también quiero poner los medios para intentar mejorar, intentar relacionarme más, conocer más gente, planear cosas, comer a mis horas aunque no tenga mucho apetito (sigue dándome asco todo). Y dejar que el tiempo pase, sin obsesionarme con los días que quedan para navidad, los meses que quedan para volverme a casa, ni todas esas cosas.

Hoy os habéis comido una entrada de las largas, y si habéis llegado hasta el final, ¡sois unos auténticos campeones! Y os lo agradezco. Os escribiré desde España. Bye!

Asustada

Hey!

Pues si, asustada y no porque se acerque Halloween precisamente... Os cuento.

Todo empezó con una conversación con M., la otra au pair que vive en mi barrio. Al poco de conocerla, me preguntó que que tal con las ninas. Fue durante los días que tuve aquí a la madre y a la abuela para ayudarme. Le dije que bien, que eran un encanto. Me puso cara rara y me dijo que no era lo que la anterior au pair le había dicho. Bueno, en definitiva no le di más importancia.

Mi relación con M. fue creciendo, normal, somos las únicas dos au pairs del pueblo, y el otro día estuve cenando con ella en su casa. Hice la peor y más desastrosa tortilla de patata que jamás nadie haya hecho, pero muy amablemente me mintió y me dijo que estaba muy buena (en este pueblo nadie tiene una sartén de un tamano normal que no se pegue?). Total, que después de que me dejase utilizar su wifi y de que yo pudiera al fin Skypear un rato, conversamos. Me dijo que había conocido a la anterior au pair y que esta le había dicho que la alivió irse, que los padres eran simpáticos pero que tenian algunas cosillas, y que las ninas eran complicadas y a veces crueles. Esto me dejó un poco más preocupada, emparanoiada diría yo, de hecho dormí fatal dándole vueltas al tema.

El colmo fue cuando esta manana fui a pasar el día con una nanny que trabaja en el pueblo. Es la persona más dulce y encantadora que he conocido jamás, pero no al modo afectado y empalagoso del resto de los ingleses, sino cálida de verdad. Me preguntó que qué tal con las ninias, y le conté un poco por encima, sin profundizar mucho porque soy una bocazas, esta es la verdad, y nunca se sabe a quien le puedes contar qué. Pues resulta que me dice que no me preocupe, que son unas ninas muy difíciles y que lo piensa más gente. Y yo como "Whaaaaat?!".

Y por fin llego a casa y la anterior au pair de las ninas me escribe por el Facebook que sus dos o tres primeros meses fueron muy duros (aunque en honor a la verdad me dijo que fue porque las ninas nunca habían tenido au pair y les costó adaptarse). Pero, tres meses!? Eso es mucho tiempo para adaptarse...

Así que aquí estoy yo, me han contado la historia de miedo más aterradora del mundo y tengo pesadillas. Pero lo irónico es que en realidad, aunque ahora esté emparanoiada con este asunto, no pienso que sean tan malas. Pienso que a los ninos ingleses les educan para ser tranquilos y educados y estas ninas han salido muy espanolas: gritonas e irreverentes. Estoy tan acostumbrada a ninos gritones, salvajes, caprichosos y malencarados que ya no me asusta nada. Y aunque si es verdad que es agotador y que a veces me pongo de mala leche porque sobrellevo mal el cansancio, y pienso "esto en Espana lo arreglaba yo con un buen bofetón en el morro" (en realidad tod palabrería, porque excepto algún azote en el panial nunca he pegado a mis sobrinos ni creo que sea una opción para educar a ninos), pues no creo que sean muy diferentes de los ninos que he conocido en mi vida. Además, aunque esto ya os lo contaré en mi próxima entrada, no es que me pueda quejar de ser la au pair más ocupada del mundo.

Y por ahora esto os cuento. Estoy muy emocionada con mi visita a Espana, y también con ir a tomar algo hoy con otras au pairs, y con ir a jugar a los bolos manana! Incluso creo que estoy en proceso de conseguir una bici. Así que como veis, poco a poco y sin desesperarse, todo se va encarrilando. Y a vosotros os deseo un feliz jueves, el fin de semana ya casi esta aquí, así que keep calm and dance on the table! Un beso enorme!

Una semana

Hola amig@s

Cómo llevamos esta maniana de lunes? Se que este maldito primer día de la semana cuesta arrancar, así que a ver si con una entrada se nos levanta un poco el humor. Hoy por la tarde hace una semana que llegué, y es gracioso que solo una semana después ya esté comprando vuelos para volverme. Y es que es extranio que estos ninios ingleses solo acaben de empezar a cole y ya tengan una semana de vacaciones... vaya una vida llevan! Para mi mejor hasta cierto punto, es bueno porque me voy a casa y es malo porque me voy a casa jajaja. Me explico, ir a casa es bueno, porque voy a ver a mi familia, a mis amigos y a J. y eso siempre me hace feliz feliz, ademas de poder aprovehcar para traerme cosas que me dejé y necesito, pero por otra parte  me voy a gastar un dinero considerable en los vuelos y por otra, a la vuelta voy a tener que repetir las despedidas, los lloros, el mal rato... Hubiese preferido tener esta semana libre un poco mas adelante, ya que me da no se que volverme una semana cuando solo acabo de llegar, pero es tan tentador que no he podido dejar pasar la oportunidad.

Esta entrada es para recapitular la enorme cantidad de acontecimientos y emociones que he tenido que afrontar desde que llegue, y que conclusiones saco ahora que ya he tenido tiempo de superar el shock inicial y asumir la situación. Ya sabeis que los primeros días atravesé mi pequenio infierno personal. La falta de Internet y lo aislado del pueblo habían sido un golpe bajo. Me sentía tan profundamente desgraciada que lo único que pensaba era en marcharme corriendo de aquí. Tampoco parecía que la madre estuviese muy feliz de verme así, cosa que entiendo. Pero después del segundo día empecé a encontrarme notablemente mejor, hasta tal punto que ahora, sólo una semana después, creo que puedo dejar de decir que "estoy mejor" y empezar a decir que "estoy bien". Tenía miedo de que el fin de semana fuese un paso atrás en mi mejoría, porque lo iba a pasar sola (el viernes y el sábado), pero afortunadamente no ha sido así. El viernes me di una seniora paliza limpiando (tres horas de cleaning? Ja!), asi que me fui a la cama muy pronto con la intención de dormir la maniana del sábado como una campeona. Pero como aquí la vida es así, a las 8.30 estaba despierta... Me fui a Bishop's e intenté hacer recados y resolver asuntillos pendientes: el carné de la biblioteca, la cuenta del banco, las academias de idiomas... No fue un día muy satisfactorio, en el sentido de que no pudé formalizar nada de lo dicho, pero al menos se que necesito para la próxima vez que vaya. Así me entretuve hasta las 5, y volviendo en el autobus, con la música puesta y pensando en mis cosas, me di cuenta de que no estaba "mejor", ni "bien", sino feliz. Echo más de menos a la gente de lo que puedo ni expresar, pero estaba feliz. Así que si, ahora se que puedo hacerlo. Que la felicidad no es un estado permanente, que habrá días que no pueda con la vida, que estaré triste, pero que puedo estar a gusto aquí y vivir igual de feliz que en mi casa. O casi. Y como estaba feliz, decidí compensar un poco a la familia por mi tristeza y apatía de la semana y les hice una tortilla de patata. La realización fue un desastre (lo mancho todo mientras cocino), pero el resultado , un éxito: cenamos todos en paz y armonía y fui felicitada por mi deliciosa tortilla.

El domingo fue aun mejor, ya que por fin pude conocer a Lucía y a su propio J. Lucia ya ha sido mi salvación más de una vez, pero ayer aun me dio otra alegría: una forma de poner wifi en mi laptop a traves del movil. Una vez comprobamos que habia cobertura en mi habitacion, solo queda comprar la tarjeta, aunque esto tendrá que esperar hasta el jueves, que vuelva a Bishop's Stortford. Espero que funcione, y así me quede un problema  menos que solventar. Los otros dilemas que tengo son conseguir una bici barata y, por supuesto, apuntarme a una academia de inglés.

Y aquí va la preocupación del momento. Sobre lo que ahora tengo dudas es sobre el aprendizaje del inglés. Yo he venido aquí fundamentalmente a aprender el idioma. Y si, muy cazurra y dura de mollera tendría que ser para no mejorar algo en 9 meses, sobre todo con el excelente listening que es tratar de entender a una ninia llorando desesperadamente con una servilleta de tela metida en la boca farfullando algo. Pero a mi no me vale con mejorar un poco. La experiencia tiene que ser aprovechada al máximo, porque no me perdonaría haberlo dejado todo, TODO lo que tiene algún valor para mi en la vida para volver sin haber aprendido nada. Y vaaaale, se que sólo llevo aquí una semana, pero veo que me cuesta lo mismo hablar y entender, o que incluso estoy aun más trabada. Puede que sea porque ya no tengo los sentidos tan alerta como con la emoción del principio, pero por el amor de Dios, es que no soy capaz de conjugar ningún tiempo verbal! Qué narices me pasa? Así que nada, sigo en pie con mi propósito de "todo en inglés": libros en inglés, series en inglés, televisión en inglés, conversaciones en inglés, y espero poder asistir pronto a clases.Y poder notar también "pronto" alguna mejora sustancial.

Y de momento lo voy a dejar aquí, porque tengo que salir enseguida a por I., que espero que no me reciba llorando porque quiere a mami, como esta maniana. Sólo me queda decir una cosa, la más importante de la entrada. Hoy dedico este espacio, este pequenio rincón de mi mundo, a la persona más buena y maravillosa de este mundo: mi madre. Esa persona que siempre ha estado ahí para quererme y cuidarme, y para amarme y perdonarme fuera lo que fuese que ocurriese en esta vida. Feliz cumpleanios mamá, te quiero! Y ojalá estuviese en casa para darte el abrazo y los mil besos que me muero por darte. Y en honor a mi madre y la distancia que nos separa, a las ganas que tengo de verla, a las veces que pude abrazarla y no lo hice, y ahora no puedo, levantaos ahora mismo los que podais e id a darle un gran beso a vuestras madres y a decirles que las quereis más que a nada en este mundo, porque todos somos sustituibles, menos las madres. Adios!

Luz al final del tunel o el ojo del huracán?

What's up guys!

Esta entrada va a ser más agradable que la anterior. Ciertamente me siento mucho mejor ahora. Las manianas y las noches siguen siendo un poco duras, me sigo resintiendo de la falta de Skype y sigo con el estomago del revés, sin hambre y vomitando, pero pienso que si la angustia y la tristeza se han ido disipando, lo demás se pasará también. O será esto el ojo del huracán? Será un espejismo y luego me pegará el bajón más fuerte? Yo creo, y espero, que no. Pero bueno, nunca se sabe.
Hoy he podido relacionarme por primera vez con alguien fuera de mi host family. En el pueblo hay otra au pair y hoy, que tenia mucho tiempo libre por la maniana, hemos ido juntas hasta Bishop's Stortford. Estoy contenta porque M. es muy agradable y me entiende, porque tenemos el mismo tipo de problemas o similares como au pairs. Empezar a hacer amigos lo hace todo un poco más fácil. Además, que no sea espaniola me obliga a hablar en inglés, lo cual es lo ideal. M. va a presentarme a más au pairs de Bishop's, pero ahora me enfrento a un nuevo problema. La mejor manera de salir del pueblo es el tren, pero hace falta bici porque está lejos andando. Quiero ir dando un paseo un día, para ver si es viable ir andando, no siempre pero alguna vez. Hoy he hecho el trayecto en bus y lo que si parece es peligroso, porque la carretera es muy estrecha y no hay arcén ni acera.
Hablando de lo cual, los ingleses son unos kamikaces con los coches, o al menos los conductores de autobus. Hoy casi nos matamos dos veces. Y el autobus ha llegado, tanto a la ida como a la vuelta, más de 15 minutos tarde. Un desastre, vaya.
Con respecto al aprendizaje del inglés, es un poco pronto para decir nada aun. Es agotador intentar entender todo el rato a la gente, a las ninias, la televisión...en ingles. Y tener que concentrarte para decir correctamente lo que quieres expresar es aun más cansado. Cuando me contaban historias sobre gente que se va a otro país meses, y anios, y apenas mejoran el idioma, no lo entendía. Pero ahora lo entiendo: es  tan fácil desconectar cuando lo que te dicen no te importa, o soltar sustantivos y verbos en infinitivo y esperar que el otro lo entienda, que casi siempre lo hace... Es tentador, pero el intríngulis esta en intentar entender y en decir lo que pretendes decir lo más correctamente que puedas, aunque necesites más tiempo para pensarlo. La cuestión es que varias personas en el pueblo me han dicho ya "Oh! Your english is good!", pero no se si me están vacilando, si quieren ser amables o si creen que los espanioles no sabemos decir ni "Hello" y en comparación les parece que se la leche, porque os aseguro que mi inglés es de todo menos bueno, si fuera bueno no estaría aquí. En fin, la cuestión es que voy a hablar más inglés aquí en una semana que en toda mi vida.
Creo que esto es todo de momento. Echo de menos manejarme con mi ordenador, porque yo soy del tipo de personas que tiene el ordenador conectado todo el rato, aunque sólo tenga una peli o un capítulo de algo de fondo, y aquí no puedo estar todo el día con el de la familia...Pero intento manejarme como puedo. Los madrugones tampoco son algo a lo que esté acostumbrada, hoy me he despertado a las 6.50, yo ni sabía que el mundo existiese a esa hora! (excepto los días que me voy de fiesta). Así que hoy me he levantado cansada y tengo ganas de irme a mi habitación y morirme un rato. Y a eso me voy. See you!

Lejos de casa

Hola chic@s, pues por fin puedo escribir para contaros las novedades. Primero de todo, perdonadme porque estoy con un teclado ingles, y si hay una tecla para poner tildes, por Dios que no la he encontrado. Y por descontado, no habra enies jaja.
Os preguntareis si me esta yendo bien. Pues objetivamente si, pero mi tristeza, mis nervios, mi falta de apetito y mis ganas de llorar y volverme a mi casa dicen lo contrario. Ayer fue un dia de despedidas, deje a mi madre y a mi tio bastante tocados, aunque intente mantener la compostura por ellos. Pero cuando mi tio me dejo en el aeropuerto y mientras esperaba que J. saliese de trabajar y me hiciese compania hasta la salida del vuelo me deshice por completo. Los taxistas debian estar pasandoselo bomba, un reality show en vivo y en directo. Pero ya llego J., nos pusimos a hablar de Gandia Shore y, comparandome con esos idiotas retrasados, me senti mucho mejor. Pense que la hora de coger el vuelo seria la peor, pero cogi el vuelo bastante bien y, aparte del dolor de cabeza que me entra siempre, no me sentia mal, ni triste. Cuando llegue y recogi mi maleta, llame para que me recogiesen y me encontraron sin problemas. No me puse nerviosa con ellos ni nada, y parecia que me hacia entender y yo los entendia (me vinieron a buscar la madre y el padre). Se mostraron encantadores conmigo. Cuando llegue a la casa, era mucho mas aun de lo que me esperaba: un camino de grija con un jardin llega a la puerta, la entrada es adorable, la planta baja tiene dos salas de estar enormes y una cocina gigante, y la parte de arriba cuatro habitaciones, y la mia, como ya habia comentado, con banio propio. Mi habitacion es lo mas adorable y acogedora que puede ser. Y las ninias...bueno, se me echaron a los brazos desde el primer momento. La mayor, E., es la tipica ninia de seis anios, parlanchina, cariniosa, quiere que se haga todo a su manera. De hecho ahora mismo me esta haciendo una trenza. I., la pequenia, es mas timida y maniosa. Me he fijado en que es muy susceptible y llora mucho si esta cansada, asi que creo que es con la que mas voy a tener que lidiar, ademas es con la que mas voy a estar. Pero las dos son geniales.
Y donde esta el problema? Os preguntareis...Bueno, no es obvio? No es mi casa, ni mi habitacion, ni mis sobrinas, ni mi punietero pais. El primer problema que para mi es importante es que no hay wifi. La madre me dijo que habia muchos puntos de acceso por la casa, y en mi habitacion hay un cajetin, pero no tiene pinta de ser para Internet porque no tiene la misma forma que el cable de Internet. La madre de ha dicho esta maniana que tiene pensado poner wifi pronto, pero "pronto" es algo tan poco concreto...Pronto para ella puede ser este mes o en algun momento de este anio o el que viene...La cuestion es que ante mi ansiosa peticion de que busquemos una solucion para poder conectar mi laptop, lo unico que me ha dicho es que pruebe a hacerlo en el salon o si no use el ordenador de la familia, que es lo que estoy haciendo ahora. En fin, cuando este sola con las ninias ya procurare buscar un lugar donde conectarme, ahora con toda la familia aqui me da apuro ir buscando algun cajetin desesperada por toda la casa, o enredarles en el ordenador buscando otra clavija para mi portatil. Pero bueno, no tener internet en mi habitacion ha sido un palo para mi, porque no puedo hablar por Skype con mi madre y con J., y yo que contaba con eso... Pues este asunto ya me hizo ir a la cama angustiada, y entre unas cosas y otras he dormido poco.
Hoy me he despertado a las 7 y he bajado a desayunar. El dia pues ha consistido en enseniarme donde esta el cole de las ninias, presentarme a la gente, llevarme a Bishop's Stortford a comprar algunas cosas de higiene que necesitaba, recoger a las ninias...Hasta el momento de la comida, no estaba mal, pero me he empezado a encontrar mal mientras comia y lo he vomitado todo, bueno todo, la sopa rara que me ofrecieron para comer. Soy una persona que come de todo mas o menos, como a todos me gustan mas unas cosas que otras, pero el cambio gastronomico es enorme y a peor, porque comen todo precocinado y francamente mal. Pero no vomite porque me sentara mal la comida, sino porque me siento mal en general. Echo de menos a mi familia y a mi gente, y estoy pasando un mal rato. Que el pueblo sea tan pequenio no ayuda, pero bueno no es el peor de los males. El peor de los males es pensar que solo llevo aqui UN dia y estoy fatal, voy a tener que pasar nueve meses asi? Supongo que luego mejora, claro, si no no habria au pairs en el mundo, pero tambien depende del caracter, y si resulta que yo no estoy hecha para esto y no va a mejor? La verdad, teniendo en cuenta que habia estado viviendo en Oviedo, pense que llevaria esta experiencia algo mejor, y estoy sorprendida de estar pasandolo asi. Pero en fin, concluyendo ya, no quiero que ninguna futura au pair se desanime por lo que estoy escribiendo. En fin, quien quiera vivir una experiencia como esta, que tenga claro que los primeros dias son asi, pero esperad a ver que escribo dentro de un mes. Hay una probabilidad de que dentro de un mes escriba lo mismo, pero si ese fuese el caso, si de aqui a un mes me siento igual, les comunico que deben buscar una nueva au pair porque me voy. Os digo desde lo mas profundo de mi corazon que me joderia a mas no poder, porque hay muchas cosas que me da miedo hacer en esta vida, entre ellas esto que estoy haciendo, pero quiero pensar que el miedo no me ha detenido, pero que sentido tendria estar nueve meses aqui sufriendo? Si solo fuesen a ser tres o cuatro pues me fastidiaria, pero nueve...
Bueno, pues ya os cuento, apechugando con el mal rato y esperando que sea pasajero. Y desesperandome con la busqueda de vuelos para Navidad, que estan cariiismos. Os seguire contando, esperando que las proximas entradas sean mas alegres. Besitos desde Henham!

Última noche

Bueno, pues ha llegado el momento. Esta es mi última noche en España y he de reconocer que siento un vértigo inmenso ahora mismo. Parte porque no me queda casi tiempo y aun estoy peleándome con las maletas, y parte, la más grande, por tener que dejar a todos mis seres queridos aquí. Semanas y semanas sola en otro país, sin poder abrazar a mi madre, chinchar a mis sobrinos, besar al amor de mi vida. ¿Para que se me ocurriría a mi meterme en esta historia, con lo bien que estoy yo en mi casa?

Si, se lo que me vais a decir, que me anime, que vale que al principio es duro pero que luego te acostumbras, que es toda una experiencia... Y si, también se que lo hago porque mejorar el inglés repercutirá en mi futuro en positivo, la experiencia me enriquecerá, vivir un tiempo en el extranjero siempre es recomendable, etc. Pero esto son cosas que aprecias con el tiempo, y yo, en estos momentos, sólo siento tristeza y miedo. Se que es irracional, se que tengo que ser positiva, pero los sentimientos son los que son y, dado que es mi última noche aquí, voy a permitirme ser una llorica blandengue. Ya tendré tiempo de hacerme la fuerte una vez llegue allí.

Encima las maletas me están volviendo loca. Ya no es sólo que no me quepa todo lo que necesito, que ciertamente no me entra, es que una vez tenía la maleta preparada resulta que me paso del peso. ¿Para que le compraría a la familia una botella de vino y no una ligera y pequeña caja de bombones? Así que mañana, en vez de pasarme la mañana relajada y disfrutando, tengo que deshacer toda la maleta y prescindir de lo prescindible, que qué será eso, me pregunto yo, porque a mi forma de ver me hace falta todo. Pensareis que soy una coqueta con cien mil prendas de ropa...nada más lejos de la realidad. Pero aun así no me entra, ¡malditos abrigos! 

Aun tengo que ir al médico mañana y, como os digo, pegarme con la maleta. Mi vuelo sale a las 17:20, y se que las horas previas van a ser un baño de lágrimas. Pero bueno lo hecho, hecho está, ya no se puede dar marcha atrás, ni quisiera hacerlo. Este es mi reto personal y tengo que ser fuerte. Sólo desearía poder tener a J. cerca...eso me lo haría todo mucho más fácil. Cada vez que pienso en que no podré verle se me rompe el alma en mil pedazos. Y bueno, voy a parar ya que esto empieza a parecer una canción de Alejandro Sanz.

Estas son mis reflexiones previas al vuelo, poco alentadoras. Pero aunque ahora mismo no os lo creáis en general emprendo esta aventura con ilusión y ganas. Me gustaría escribir mañana y contaros las primeras impresiones bien recientes, pero me temo que va a ser un día movidito y no creo que me de tiempo. Pero escribiré pronto, de momento deseadme suerte. Bye!

Pero si tengo que...

Hola gente!

¿Como estáis? Yo, como bien supondréis  estoy "pa'trás y pa'lante" con los preparativos, y sobre este tema va a tratar la entrada.

Cuando el domingo leí el correo en el que la familia me decía que me escogían a mi pensé "Bueno, sólo tengo que comprar los billetes, tramitar la tarjeta sanitaria europea y hacer las maletas y ya estoy lista para marchar". Pero a los 5 minutos pensé "pero si también tengo que ir al médico". Y a la media hora "pero si tengo que cambiar libras". Y al cabo de una hora "pero si tengo que comprarles regalos a la familia". Y al llegar a casa pensé "pero si tengo que poner lavadoras y planchar una tonelada de ropa". Y ya llega un momento en el que te haces una lista y te preparas para una semana de preparativos (valga la redundancia). Esta es una lista de las cosas que he tenido que hacer, y advertencias sobre ellas, para que no os pille el toro si tuvierais que hacerlo vosotr@s también:

Comprar los billetes de avión: Bueno, esta es bastante obvia. Cuanto más tiempo tengáis para mirarlo más posibilidades hay de que os salga más económico, vayáis donde vayáis. Y si podéis viajar con Ryanair, probablemente os ahorréis unos cuantos eurillos. Mi vuelo, con una semana de antelación, ha costado 39 euros, más 25 euros por facturar una maleta y 6 euros de gastos de administración. Total: 70 euros, que hay que reconocer que es "regalado". Me metería ahora en un intenso y extenso monólogo sobre las virtudes de Ryanair, pero no os quiero aburrir. Quien tenga dinero y prefiera las comodidades de otras aerolíneas, que lo gaste. Yo como no lo tengo... Con Ryanair simplemente acordaos de hacer la facturación online.

La tarjeta sanitaria europea: Si podéis, tramitadla al menos con 10 días de antelación, que es el tiempo máximo que pueden tardar en mandártela a casa. Se puede pedir por Internet y dura dos años, el caso es que si no eres trabajador "no puedes solicitarla", y es de suponer que alguien que se va de au pair no está trabajando. Si no eres trabajador, entonces puedes pedir un Certificado Provisional Sustitutorio, que tiene una validez de tres meses y hay que solicitarla en un centro físico. He puesto "no puedes solicitarla" (la tarjeta) porque en el Instituto Nacional de la Seguridad Social, que es donde tienes que solicitar un Certificado Provisional Sustitutorio, a mi si me han tramitado también la tarjeta, sólo que no creo que me llegue antes de que me marche. Lo mejor es ir a solicitarlo en persona, porque si te hacen la tarjeta mucho mejor, así no tienes que renovarlo cada tres meses. Podéis encontrar la información ( y los centros en los que se tramitan) aquí: http://www.seg-social.es/Internet_1/Trabajadores/PrestacionesPension10935/Asistenciasanitaria/DesplazamientosporE11566/TSE2/index.htm

El pasaporte: Cuesta la friolera de 25,25 euros el maldito librito. Id con una foto y el dinero, claro. En mi ciudad ya no hace falta pedir cita previa, vas y te lo hacen en el momento, pero informaos porque dependiendo de los sitios puede que os tengáis que comer una cola curiosa, o pedir cita previa. Para quien no lo sepa se hace en las comisarías de policía, en el mismo sitio que los DNI. Realmente el pasaporte no es necesario para viajar y vivir en UK, pero también es verdad que, si pierdes el DNI, tener el pasaporte te ahorra más de una complicación. Yo como soy un bardal, mejor prevenir que curar.

Cambiar libras: No quería ir sin nada de dinero por si acaso, no se cuando me pagarán por primera vez, así que he ido a pedir libras. Tampoco dejéis esto para el último momento, porque a menos que sea una sucursal central tienen que pedirlas. He pedido 50 libras, ya os diré cuanto me han robado en el cambio. Actualmente el cambio está, aproximadamente, a 1.20 euros por libra.

Comprar regalos para la familia: Te van a acoger en su casa, así que lo propio es llevar un detalle. Para más inri llego el día del cumple de la peque, así que no puedo llegar con las manos vacías. Para los padres lo mejor son cosas típicas de España. Yo no soy nada partidaria de regalar cosas decorativas, prefiero los regalos funcionales, así que les he comprado una botella de vino un poco buena y una botella de aceite de oliva virgen extra. Y regalos para los niños... aquí si que ya depende de edades, géneros, número de niños, etc. Como son dos niñas pequeñas las he comprado un pompero de pompas gigantes y una cinta de gimnasia rítmica para que me quieran ellas, y unos libros de actividades para que me quieran sus padres. Les llevaré unas chuches también, que nunca están de más.

Tarifa de móvil: Dudo que vaya a usar mucho el móvil  pero si es una emergencia y hay que llamar o mandar un sms, mejor tener una tarifa roaming y que no os hagáis el harakiri al ver la factura del teléfono. Leed hasta la última y más pequeña letra de los tipos de contratos, que yo, que trabajé para una compañía móvil, se que son unos ladrones. Movistar tiene una tarifa por defecto bastante razonable, así que no he tenido que hacer nada.

Medicamentos: ¿Quién no toma algún tipo de medicación hoy en día? Aseguraos de ir bien provistos de las medicinas que podáis necesitar. Seguramente en la casa haya medicamentos de los típicos, tipo Aspirina, Frenadol y semejantes. Pero si necesitais algo más específico, mejor llevadlo de aquí.

Adaptador de corriente: Acordaos que en UK los enchufes no tienen la misma forma que en España, así que para poder enchufar nuestros propios aparatos necesitamos un adaptador, que se compra en cualquier ferretería por muy poco precio.

Las maletas y la ropa: Con ropa me refiero tanto a tener que comprarte la que vayas a necesitar como a lavar y planchar la que te vayas a llevar. Yo reconozco que tengo una obsesión con la limpieza de la ropa, y aunque muchas cosas estaban limpias, lo he lavado y planchado todo. Con respecto a la compra de ropa, hay que tener en cuenta el clima de la región a la que se va e intentar llevar ropa y calzado acorde. Pero no os obsesionéis  si se pasa algo por alto siempre se puede comprar allí. Sobre las maletas os podría dar un máster  ya que he tenido que hacer muchas. Aprovechad cualquier rincón para meter cosas, por ejemplo con calcetines dentro del calzado. Dejad las cosas pequeñas, como el cargador del móvil, la ropa interior, las camisetas... para lo último y coladlo por los bordes o los huecos que hayan quedado. Y obviamente, si no tenéis espacio, prescindid de todo lo que se pueda comprar allí y sea más barato, que suelen ser las cosas de higiene, la ropa que menos vale (camisetas, bufandas, gorros, ropa interior...), cuadernos, libros, zapatillas, pijamas y cosas así. No vayáis a dejaros un abrigo (a menos que llevéis 10) porque es lo que más ocupa, porque también es lo más caro de comprar después.
Un truquillo para ahorrar espacio y poder meter más cosas: En los chinos venden bolsas salva espacio. Se cierran y con la aspiradora se extrae el aire para que ocupen mucho menos. Son bastante baratas, he comprado una de 40x50 y otra de 70x100 por 4 euros. Vienen muy bien para las prendas de lana, las chaquetas, bufandas, gorros, etc. Me estreno con una foto para que veáis como quedan una vez las extraes el aire:

Y creo que ya está. Si echáis algo en falta, por favor, ¡decídmelo! No vaya a ser que se me haya olvidado algo importante antes de marchar. La verdad es que tengo casi todo hecho porque quiero el fin de semana libre para pasarlo con mi familia y, sobre todo, con J. Por ahora lo dejo aquí, pero como siempre os tendré al tanto. Ciao!

Un redoble de tambores

Por favor, un redoble de tambores para la noticia que os tengo que dar: Parararararararrararrarararpapa!

¡TENGO FAMILY!

La familia de Henham se ha puesto hoy en contacto conmigo para decirme que han decidido que les gustaría que yo fuese su au pair. Creo que me he tomado la noticia con mucha serenidad. Sólo me he echado a  reír, y luego a llorar.

Ya me olía la tostada bastante, pero no me quería hacer ilusiones para no venirme abajo si luego no me escogían. Ayer me mandó la madre un correo pidiéndome si podía mirar cuanto costaban los vuelos para el día 16. En fin, ¿qué más podía significar? Quise contestarla que si eso quería decir que me escogían a mi, pero pensé que tal vez querían costear el vuelo y querían asegurarse que ningún vuelo de ninguna chica costaba algo desproporcionado. En esto Ryanair me salva el culo, porque el precio de los vuelos a Stansted suele ser francamente ridículo. Cuando me desperté esta mañana miré nerviosa el correo por si me había escrito algo, pero no había nada e iba a pasar el día fuera con mi familia política. La verdad es que me pasé el día medio pendiente del teléfono por si me llamaba. Así que cuando llegué a casa de J. fui directa al ordenador y allí estaba, el correo diciéndome que habían hablado todos y que como familia habían decidido que yo era la que más les gustaba ¡Qué ilusión! Me sentí, no se, aliviada y contenta, y J. me abrazó muy contento también. Pero entonces le miré y me di cuenta... ¡9 meses lejos! ¡Qué palo! Y fue cuando me eché a llorar.

La búsqueda de familia ha durado tanto y he dado tantas vueltas que toda esta historia se había desvirtuado un poco en mi cabeza. En el fondo tenía la sensación de que encontraría trabajo, me acabaría desencantando, o algo ocurriría que impediría que me marchase. Así que cuando me he dado cuenta de que no, que me voy, la realidad me ha golpeado tan fuerte que me he sentido en medio de un huracán de emociones, todas contradictorias. Ahora estoy mucho más tranquila, y creo que en tanto en cuanto los de mi alrededor conserven la calma, yo estaré bien. Al menos hasta el día en que me vaya. 

De momento lo peor ha sido decírselo a mi madre. A ella, que no se ha criado en una generación en la que con Ryanair es más barato, fácil y rápido volar a otro país que ir en autobús a la provincia de al lado, Inglaterra la parece el fin del mundo. Pero sabe que la experiencia es por mi bien y eso la hace feliz. No para de repetir que lo único que quiere es que la familia sea buena gente y me trate bien. Supongo que las madres nunca llegan a asumir que nos convertimos en mujeres hechas y derechas capaces de lidiar con los conflictos y apañárnoslas. 

En el e-mail que me envió la familia había unas fotos de ellos, de su casa  y de la habitación en la que me quedaré. Ellos parecen adorables, las niñas son una auténtica monada, de verdad, para derretirse con ellas. La casa es grande y bonita, muy inglesa, ya sabéis. Y "mi" habitación es preciosa y me gusta más que la de mi casa jaja, ¡y tengo baño propio! En el e-mail me ha ampliado las condiciones e información sobre transportes, academias de inglés, el dinero de bolsillo, etc. Me lo ha vendido todo muy bien, ¡espero que todo sea como me lo pinta! Finalmente me dijo que si podía volar el 16 por la mañana, que sería genial. Como sólo hay vuelo por la tarde, me ha pedido que si puedo ir el 15 para poder pasar todo un día juntas y conocernos mejor, obviamente un día más o menos no me supone ningún problema.

Y nada, ahora me queda por delante una semana de preparar cien mil cosas, la tarjeta sanitaria europea, ir al médico, comprar regalos, cambiar libras...y las temidas maletas. Pero no adelantemos acontecimientos, que de todo esto hablaré cuando llegue el momento. Ahora, a irse a la cama con los nervios en el estómago. Buenas noches mis angelitos!

Mi segunda entrevista

Estoy flipando, de verdad. Estoy alucinada de que mi pequeña pero eficientísima red de contactos funcione muchísimo mejor que una agencia "seria" a la que tengo que pagarle un montón de dinero. Que llevo seis semanas en la agencia y sólo he conseguido tener una entrevista, y en dos contactos que me han conseguido mis chicas guapas, ya he tenido una entrevista, ¿cómo es posible?

En fin, a lo que vamos. En una entrada anterior Lucía me comentó que una chica buscaba por facebook una au pair para su familia porque ella tenía que marcharse, así que me puse en contacto con dicha chica. No tenía muchas esperanzas, porque la última vez que me pasó algo similar ni siquiera me contestaron (que feo por su parte, por cierto). Pero al día siguiente me dijo que le pasaría mis datos a la familia y que si ellos estaban interesados se pondrían en contacto conmigo. No pasó nada de tiempo, unas pocas horas, que la madre me envió un correo, pidiéndome que le mandase información sobre mi. Como tenía un montón de documentación preparada por los trámites de la agencia, le envié todo lo que me pareció relevante. Seguimos en contacto vía e-mail y esta mañana me dijo que si podía llamarme por la noche. Y nada, recién he tenido la entrevista. Estaba algo nerviosa, igual no tanto como con la primera entrevista pero bastante, y que fuese por teléfono y no por Skype me tenía algo preocupada. La verdad es que no la he entendido más que la mitad, y seguro que me he perdido alguna información súper importante, pero he sobrevivido a la entrevista y he sabido responderla, que no es poco. Me dijo que iba a entrevistar a dos chicas más, y que antes del lunes me decía algo. Así que cruzad todos los dedos por mí, porque de todas las familias he de reconocer que esta es con la que más me apetecería quedarme.

La familia tiene dos niñas, de 4 y de 6. Por lo que la he entendido, tengo que levantarlas y vestirlas para ir al cole, recogerlas después,  darlas de comer y cuidarlas hasta que lleguen ellos sobre las 17.30. Viven en Henham, un pueblín pequeñito pero muy cerca de Stansted (bieeen!). Sólo rezo porque haya buenas formas de transporte hasta alguna ciudad un poco más grande, pero ya investigaré. 

Y poco más os puedo contar, que aunque la familia no me escoja, me alegro de que haya algo más de movimiento. Seguiré buscando cosas por si acaso, claro. Al fin y al cabo tengo una posibilidad entre tres jeje. Pero si me escogen, como siempre, vosotr@s seréis los primeros en saberlo. Buenas noches pequeñines! 

Martes malditos

доброе утро amig@s!

Pues si, parece que los martes tienen algo, ya que desde que la agencia se puso en marcha van dos martes, semana si semana no, que me llaman con información sobre alguna familia. Esto es bueno, pensareis. Lo sería si con dichas familias llegase a tener una entrevista al menos, pero que me llamen para darme falsas esperanzas...eso es cruel. 

Ayer me despertó una llamada de la chica de la agencia, avisándome de que me habían enviado información de una familia, que aun no sabían si querían tener una entrevista conmigo pero que le echara un vistazo a la info y les dijese si yo estoy interesada. La familia parecía genial (todas me parecen geniales :P), tres niños, con animales, parecían bastante liberales. El horario era un poco extraño, mucho trabajo los tres primeros días de la semana y apenas nada los demás. El problema, el de siempre, viven en Bristol. Esta vez, al menos, en la misma ciudad, lo que a la hora de estar allí te da más juego. De verdad que me he vuelto loca buscando formas alternativas de venir a casa que no impliquen el aeropuerto de Stansted, pero no hay manera. Maldito Ryanair, ¡¿por qué no pones un vuelo Bristol-Santander?! Pero de nada han servido mis tribulaciones, porque ya no he sabido más de la agencia. Es la historia de mi vida.

Sigo buscando por mi cuenta, sobre todo en aupair-world. Algunas familias son estupendas, como hechas a mi medida, jaja, pero como ya os he dicho, suelen tener decenas e incluso cientos de solicitudes, ¡algunas más de mil! La red de contactos también sigue funcionando, mis maravillosas lectoras me lo comentan cada vez que se enteran de algo que me pudiese interesar, y también tengo por esta vía una opción abierta, a ver en que queda.

La cuestión es no desesperar, cosa que hago fácilmente, y seguir buscando. Y eso voy a hacer, seguir aquí buscando y teniéndoos al día a vosotr@s, que es lo que me mantiene cuerda. прощай!

Mil

Hoy he conseguido mis primeras mil visitas, y quería compartirlo con vosotr@s, y sobre todo, daros las gracias. A los que me leéis y a los que participáis  A los que estáis de paso y a los que os quedáis a seguir mis aventuras. A los que encontráis respuestas y a los que me las dais. Así que muchas gracias, porque cuando empecé esto pensé que sería poco más leído que mi diario (¡que ese sí que espero que no lo lea nadie!), pero veo que, aunque el tema sobre el que escribo no sea muy cotidiano, hay gente que se interesa y eso me llena de alegría.

También os quería contar que me he creado un perfil en aupair-world.net, porque ya me he cansado de estar sentada esperando a que me llamen. Aun así, ha sido un poco desesperanzador ver que casi todas las familias tienen cientos de solicitudes recibidas. Además, la página está en inglés, aunque es muy intuitiva y sencilla y usarla no crea muchas dudas ni confusiones. Hoy no ha sido un día muy fructífero, en el sentido de que ni he recibido ninguna solicitud por parte de ninguna familia, ni me han contestado aquellas a las que yo les he enviado mensajes. Pero sólo llevo un día, así que es lo normal. Lo importante es que, cuanto más me mueva, más oportunidades tendré de encontrar una familia antes. Las ventajas de este sistema son que, además de esperar a que las familias contacten contigo, puedes ver si las familias encajan con tus necesidades y enviarles un mensaje solicitando más información, lo cual es muy positivo. Aunque creo que lo ideal es "pillarles" nada más se inscriban, porque, como os digo, les envían muchas solicitudes y dudo que se las lean todas. Al participar en la página au pairs de todos los países hay más competencia.

Como ya supondréis, hay cero noticias por parte de mi agencia, pero ya he superado un poco la desesperación de ayer. Sigo viendo estrenos de series y buscando cosas útiles que hacer, pero por ahora, hago poco. De momento no hay más novedades, así que me despido, au revoir!